Las arengas a quien en ese momento se transformaba en ex gobernador, fueron vitoreadas con fervor. Por fin tendríamos un gobernador austero que no recurriría al dinero de los contribuyentes a favor de su imagen.
O en esos momentos el doctor hablaba con verdad, o pensaba que seguía en campaña.
Cómo sea, al doctor, como a la mayor parte de los políticos, muy pronto le empezó a marear el poder y se subió a un ladrillo pensando estar en la cima del Everest.
En la página de transparencia del gobierno del estado, a la cual se puede acceder por la vía del portal de la Secretaría de Finanzas, dado que la del ejecutivo está en reconstrucción, se confirma esa actitud enfermiza de los gobernantes de publicitarse hasta el hartazgo en los medios de comunicación.
En el período de enero a marzo, el gobierno de Fernando Toranzo ha gastado en publicaciones difundidas en medios de comunicación electrónicos e impresos, la nada despreciable cantidad de 4 millones 143 mil 442 pesos con 49 centavos.
Esa cantidad se desprende de un total de 169 publicaciones y representa que en 90 días, se gastó en publicidad gubernamental un promedio de 46 mil 038 pesos diarios.
Ese gasto equivale a 846 salarios mínimos diariamente utilizados para posicionar la imagen del gobernador y la institución que encabeza.
En tiempos de crisis económica y de presupuestos gubernamentales acotados por la caída de ingresos, se pensaría que uno de los rubros a recortar sería el gasto publicitario. En el caso del gobierno estatal hasta el momento no ha sido así.
En referencia a Marcelo de los Santos, Juan Ramiro Robledo gustaba platicar a manera de anécdota que en periódicos, como El Sol de San Luis, sufrían a mares por diseñar su página principal. El apuro no consistía en seleccionar la información de mayor interés general, sino escoger la fotografía más bonita del entonces gobernador.
La historia parece repetirse con el doctor Fernando Toranzo. Ese periódico de la Organización Editorial Mexicana ha acumulado en el trimestre ventas al gobierno por un millón 116 mil 178 pesos.
Pero hay un dato que demuestra que la publicidad en ese diario va de la mano de lo que paga el gobierno. En la edición del 19 de febrero de 2010 se publica a ocho columnas “La Zona Militar a nueva casa”. Con ese mismo enunciado, aparece la factura que pagó la administración estatal con un costo de 40 mil 600 pesos (sétima fila de la página dos de la lista).
El Sol de San Luis, al igual que otros medios que venden espacios al gobierno, no tiene la culpa de la animosidad publicitaria de las autoridades, lo que se demuestra es más bien que con el doctor Toranzo existe una especie de gatopardismo, pues había ofrecido liquidar el culto a la personalidad y esto más se sostiene igual que en el gobierno anterior.
Fuera de El Sol que es la empresa que más publicidad recibe, el presupuesto mediático es por decirlo así, democrático: a todos les toca algo.
Editora MIVAL aparece con 283 mil 504 pesos, mediante 13 anuncios o gacetillas, La Razón 411 mil 075 pesos, El Heraldo con 322 mil 984 pesos, La Jornada San Luis con 340 mil 808 pesos.
En total suman 35 empresas con las que el gobierno ha contratado espacios publicitarios en el primer trimestre del año, desde revistas, portales electrónicos, radiodifusoras y televisoras tanto de la capital como del interior del estado.
Los conceptos de la publicidad son muy variados y de entre ellos, destacan incluso titulares de noticias: “Inédito respaldo educativo”, “Entrega de recursos municipales”, “Gestiona el gobernador Más recursos”, “Entrevistas y Reportajes de Acciones de Protección Civil”, “Grabación y Entrevistas visita del director de Conagua”; "Obtiene Toranzo recursos federales" (en la sexta fila de la página uno de la lista).
Asimismo, “Difusión y cobertura de actividades del gobernador”, “Cobertura informativa”,“El gobernador supervisó obras”, “El gobierno da todo su apoyo a SLP”, “El gobierno refrendó su compromiso al campo”, “Meses de Gobierno Trabajo y Resultados”, “Ceremonia del Día del Ejército Mexicano”, entre otros más.
De la larga lista de conceptos, usted también podrá detectar encabezados que leyó como noticias, y podrá descubrir que se trataba de avisos gubernamentales de promoción.
La publicidad gubermanetal generada a través de las oficinas de Comunicación Social de la Instituciones Públicas, obedece a la lógica de informar a la sociedad sobre asuntos de relevancia y de interés general, como por ejemplo, anuncios sobre campañas de salud, protección civil, seguridad pública entre otros.
En ese momento, tiene sentido de ser, pero eso se deforma en el momento en que detrás está el propósito de crear una imagen positiva del gobierno y de la persona. Esto, es lo que podría estar ocurriendo al gobierno torancista, toda vez que la publicidad que emite es en su mayoría, algo relacionado con una actividad, un discurso o un evento oficial.
COMENTARIOS Debe pararse dinero ilegal a diarios Mientras que estoy de acuerdo con la denuncia sobre el dispendio del gobernador Toranzo en publicidad gubernamental (“Publicidad gubernamental un exceso en tiempos de crisis”), difiero en el análisis que hace Proyecto Tábano sobre en qué reside la culpabilidad de los diarios en aceptar tantos millones del erario. No es únicamente que el pecado sea que los medios de comunicación se conviertan en cómplices—yo les llamaría sicarios—del gobierno en eso de explotar para su beneficio el narcisismo del gobernador en turno, es que presentan una propaganda como información, faltando así a la mas elemental ética periodística. El que los medios se hayan repartido en 2009 mas de 80 millones de pesos anuales que paga el gobierno de San Luis Potosí a la prensa para "darse guayabazos" no solo es inmoral, también es ilegal, pero más que nada periodísticamente incorrecto, algo que simplemente no se comprende en un país carente de cultura periodística, tras 70 años de dictadura priísta, más los ocho que van del "gobierno del cambio", un cambio que se quedó en promesa de campaña. La sociedad—el pueblo—tiene el derecho a recibir información, pero de hechos espontáneos y de manera imparcial, no propaganda prefabricada y parcial. Es antiperiodístico incluir publicidad en el formato y la presentación usual de las notas, y en páginas usualmente dedicadas a la información, como es una primera plana, es decir propaganda disfrazada de notas. El colaborador de Proyecto Tábano, Juan Antonio Gonzalez, ya tiene experiencia en eso de escribir sobre el chayote, de hecho, ya habia escrito algo muy similar hace 20 meses, me refiero a la nota "En prensa, MSF cuesta 78 mdp", (Diario Pulso, 7 de septiembre, 2008). Aunque yo elevo esa cantidad a 80 millones de pesos porque hay que tomar en consideración el millón de pesos que anualmente repartía Marcelo de los Santos en la organización y presentación del Premio Estatal de Periodismo, un gigantesco "chayote" disfrazado de "premio", más los clásicos "sobres" que la “ex gobernadora” María Luisa Paulín y otros funcionarios públicos reparten, no tan discretamente, entre reporteros y fotógrafos para que escriban y publiquen tal o cual “nota” o foto, hasta en las páginas de sociales. Es por eso que a los diarios potosinos no les importa no tener publicidad comercial, con lo que les regala el gobierno les basta para tener y mantener sus edificios propios, rotativas, equipo computacional, vehículos y personal editorial y administrativo. Proyecto Tábano debe apuntar sus baterías a otro blanco igual de chapucero, ilegal, corrupto y anti periodista, el de los reporteros que están devengando sueldos como "aviadores" en alguna dependencia, como es el caso de un monero muy conocido que cobra sueldo, sin tener que trabajar, en el Consejo Estatal Electoral. Aparte de que las gacetillas son anti periodísticas, son también un engaño y un fraude contra el lector. Los diarios potosino también deberían transparentar sus ingresos por cualquier clase de publicidad, pero mas que nada su tiraje diario. Proyecto Tábano hace bien en destacar la voracidad insaciable de El Sol de San Luis, (“La historia parece repetirse con el doctor Fernando Toranzo. Ese periódico de la Organización Editorial Mexicana ha acumulado en el trimestre ventas al gobierno por un millón 116 mil 178 pesos”.), tan descarada, que se da el lujo de invertir los dineros del pueblo que recibe en chayote en la rifa de automóviles comprados con ese mismo dinero del pueblo. Considero erróneo de parte de Proyecto Tábano publicar que “El Sol de San Luis, al igual que otros medios que venden espacios al gobierno, no tiene la culpa de la animosidad publicitaria de las autoridades”. Recordemos el sofisma de que tanto peca el que mata la vaca... Tampoco es democrática la repartición ilegal y anti constitucional de chayote por publicar gacetillas solo porque “a todos los diarios les toca algo”. Escribió: Eric Muñiz de la Rosa Periodista potosino radicado en Chicago