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Tajada millonaria con recibos de pago
Por JUAN ANTONIO GONZÁLEZ Julio 12, 2010 Con Victoria todos ganan, a excepción de los ciudadanos y los contribuyentes. Como quien va a la tortilleria y paga el envoltorio de papel para el kilo de tortillas o en la panadería, la bolsa para los bolillos, en el municipio hay que pagar por el recibo con el cual le cobran al ciudadano algún servicio o contribución.
A través de una solicitud de información vía Infomex presentada a la Unidad de Información Pública del ayuntamiento de San Luis Potosí en la que se requirió el monto de ingresos para el ejercicio fiscal 2010 del concepto “Formato de Recibo” y del costo de dichos recibos impresos, esa Unidad canalizó a la Tesorería capitalina el oficio U. I. P. 029/10 para los datos. La dependencia contestó con el oficio TM-182/10, mismo que después le fue notificado al notario público. De la información entregada, se desprende que el ayuntamiento priísta que preside Victoria Labastida Aguirre, ha hecho un muy buen negocio, pero para las arcas municipales en detrimento del bolsillo de los contribuyentes. Resulta que el ayuntamiento reporta que para este año se espera obtener ingresos por ocho millones de pesos por el cobro de cada recibo que expide, pues se determinó que no sólo aplicaría para el cobro del Impuesto Predial. El ayuntamiento pagó por los recibos un total de 190 mil pesos luego de asignar a una persona moral dicho contrato tras una licitación. Los números no engañan. Cada recibo le costó al ayuntamiento apenas un peso con dos centavos y cobra cada recibo a 41 pesos. Lo anterior, porque así fue establecido en la Fracción XIII del Artículo 25 de la Ley de Ingresos del Municipio de San Luis Potosí para el ejercicio fiscal 2010, así como en el Artículo Quinto del Acuerdo Administrativo para precisar las Reglas de Operación respecto a Cobros Diversos relativos a esa Ley de Ingresos. Las primeras muestras de inconformidad con ese cobro, se presentaron durante el proceso de pago del Impuesto Predial, cuando muchos ciudadanos se preguntaban a la hora de revisar sus pagos, de donde salía un cobro adicional de 41 pesos. Luego, se han presentado algunos casos de protesta, como el de Edgar Murguía Manilla quien al ir a efectuar un pago por un servicio, se negó a pagar los 41 pesos del recibo al aducir que “no necesito recibo”. Eso metió en un brete a las autoridades municipales, mismas que pese a la inconformidad, siguen realizando ese cobro, mismo que al contrastarse con la eficiencia del gobierno, parece ser injustificable, pues si de algo se ha criticado al gobierno de Labastida Aguirre es precisamente la ineficiencia e incapacidad para gobernar bien la ciudad. |